martes, 30 de agosto de 2011

Sobredosis de energía

Me los inyecto en vena para hoy.




domingo, 28 de agosto de 2011

Canção pra não voltar


"Não volte pra casa meu amor que aqui é triste
Vá voar com o vento que só lá você existe
Não esqueça que não sei mais nada
Nada de você
Não me espere porque eu não volto logo
Não nade porque eu me afogo
Não voe porque eu caio do ar
Não sei flutuar nas nuvens como você
Você não vai entender
Que eu não sei voar
Eu não sei mais nada".


A banda mais bonita da cidade

miércoles, 24 de agosto de 2011

Despierto

Despertando a cada latido,
observando que seguías allí con tu mirada oculta en los sueños,
mientras los míos estaban delante de mis ojos.


Tu pecho desnudo subiendo,
bajando;
mi mano agarrando la tuya,
recorriendo tu brazo inerte y mi boca bebiendo de tu pelo revuelto,
el fragor de la batalla tan solo ya humeando,
pero mis entrañas incendiadas
y yo embebido de ese fuego,
mirando,
contemplando en la penumbra tus rescoldos:
los labios finos, rosados, saciados;
las manos blancas, largas, desgastadas;
los pechos escuetos, serenos, besados.


Tu corazón marcando el paso,
tu cabeza desentendida entregada al sueño 
y tu sexo recuperándolo.
Y yo perdido en ti.

lunes, 22 de agosto de 2011

Pura droga sin cortar

Puro deseo.
Y como si fuera droga,
tan puro es, que mata.
Atraviesas mi respiración con el aguijón que es tu lengua,
me quitas el aire, 
traspasas mis pulmones y recortas mi corazón con la forma de tus ojos,
siempre tus ojos.
Me desmayo en tus labios
mientras muros de papel caen y se esfuman, 
nosotros volamos en una espiral huracanada,
se me nubla la vista y me ciega tu silueta,
me vuelvo a desmayar en tus labios con la sensación de que no quiero recuperar la consciencia,
y de que quiero lo que nunca dejé de querer.
Es puro deseo,
pura droga sin cortar.

sábado, 20 de agosto de 2011

Besos abruptos

Es que aun recuerdo la noche en la que los besos surgieron abruptos,
y en la calle las palmas soñaban a nuestro alrededor;
yo sordo,
escuchaba sólo nuestras respiraciones entrecortadas por las lenguas hambrientas.

jueves, 18 de agosto de 2011

(H)orquídea

Cultivaba orquídeas.


Y me dan ganas de escribir orquídea con hache. Una hache muda que no se oiga pero se sienta, se padezca, se entrometa por los poros de la piel y cale hasta los huesos de quien se atrevió a romper el hábitat más preciado del mayor amante que tuvo. La miel de sus labios rezumaba intensidad cuando la tenía cerca, salivaba como cualquier perro de Pávlov sólo con imaginar su aroma, temblaba su frágil corazón al pronunciar su nombre y su mirada centelleaba como una noche veraniega cuando encontraba a centímetros la claridad y el osado brillo de los ojos de quien amó en un crudo silencio.


Porque el silencio suele ser crudo. Salvaje.


Jóder, ¿tan difícil es entender que no quería salir? La luz que buscaba no era la del Sol, y sus palabras donde mejor encontraban acomodo era en sus cuadernos y no en los oídos de nadie, pero el engaño y la traición a veces son más poderosos que cualquier otro arma. La violación de una intimidad tan celosa fue el mayor castigo que pudo soportar, y tras segar el tallo de cada una de sus flores, murió con ellas.


Disimuló cada uno de los movimientos de su vida tan sesudamente, que cuando le encontraron, ni siquiera sus piernas danzaban, inertes, bajo su cuello estrujado por la soga que se sintió obligado a utilizar.

viernes, 12 de agosto de 2011

Cansancio

Estoy cansado de escribir amarguras,
de lamentar la falta de presente y de extrañar un pasado cada vez más lejano,
quiero volar hacia un futuro feliz; utópicamente feliz,
si acaso;
me gustaría poder volver a abrazar y sentir que mi corazón se para a escuchar su propio latido,
bailar a solas con mi propia alegría
y saltar gritando al viento sobre las cenizas de incendios extinguidos.
Estoy cansado de dormir 12 horas y despertarme agotado.