Puro deseo.
Y como si fuera droga,
tan puro es, que mata.
Atraviesas mi respiración con el aguijón que es tu lengua,
me quitas el aire,
traspasas mis pulmones y recortas mi corazón con la forma de tus ojos,
siempre tus ojos.
Me desmayo en tus labios
mientras muros de papel caen y se esfuman,
nosotros volamos en una espiral huracanada,
se me nubla la vista y me ciega tu silueta,
me vuelvo a desmayar en tus labios con la sensación de que no quiero recuperar la consciencia,
y de que quiero lo que nunca dejé de querer.
Es puro deseo,
pura droga sin cortar.
He visto a tu doble en Tarifa...
ResponderEliminarque cosas...
Me desmayo en tus brazos...una pasada....me gustan tus palabras...seguimos..un saludo desde Murcia..
ResponderEliminarMucho mejor aspirar y que se te metan en la nariz hasta los pelillos de sus brazos que esnifar, dónde va a parar.
ResponderEliminarjajajaja que sí hombre, precisamente por el calor pegajoso...pelillos! PELILLOS A LA MAR, que aquí no hay playa!
ResponderEliminar(por cierto, me recibiste? mira que lo mismo me he caído en la carpeta de spam)
hay drogas prohibidas que hacen menos daño...
ResponderEliminartodavía no hay leyes así...
ResponderEliminarpero cuidado con los empachos son indigestiones que causan grandes daños de los que cuesta mucho recuperarse y que dejan secuelas y cicatrices imborrables...
Pues si, hubiese sido genial verte...
ResponderEliminarUn beso grande!
donde andas ahora???
que planes tienes??
a ver si hablamos x msn o algo...