martes, 27 de enero de 2009

Sansho Dayu, de Kenji Mizoguchi

"Si una persona no siente la caridad, no es una persona.
Incluso ante tu enemigo hay que sentir la caridad."

Esta declaración de intenciones hace la película desde el principio, en una entrañable conversación entre el honrado padre de familia y Zushio, su hijo, en el que será su despedida ya que ha de partir al exilio, donde le obligan a marcharse tras serias disputas con sus superiores. Es el final de la era Heian (siglo XII) y la esclavitud en Japón está muy extendida, es una época oscura y revuelta, y la familia debe separarse, marchando la mujer, el hijo Zushio y su hermana Anju por un lado, y el padre por otro. No cuento más, sabe mejor si lo descubres poco a poco.

Esta película, a pesar de contar ya con 55 años, es uno de los más bellos y significativos alegatos que contra la esclavitud y el tráfico de humanos se ha hecho jamás. También clama contra la injusticia, la opresión y el clasismo que existía en la sociedad feudal japonesa de la época, pero que en otro estado se podría trasladar a esos años 50, e incluso a nuestros días, sin duda alguna. Es un canto sencillo, realizado de manera sencilla, en la que se muestra un dolor humano desgarrador sin recurrir a primeros planos exagerados, usando planos que no dejan indefenso al personaje ante la cámara, sino que lo muestran en toda su categoría humana, con sus sentimientos y sus emociones.

Hay magníficas escenas que perdurarán en mi memoria para siempre, por su belleza y por su significado, sobretodo por su significado. La conversación entre el padre y Zushio que mencioné antes, la escena de las barcas, las marcas a fuego sobre los esclavos, la escena de Anju en el lago... No quiero desvelar nada aunque me encantaría expresar todo lo que me hicieron sentir, pero es una experiencia inolvidable el visionarlas sintiendo el placer de una película increíblemente bien hecha, con un guión tan preciso, con unos movimientos de cámara tan elegantes, con una suavidad en la historia que te va encogiendo el pecho a cada minuto, con una música que cuando surge estremece, con unos personajes inolvidables (atención a Anju, y al omnipresente padre), y jóder, uno de los finales mejor rodados que jamás he podido ver.

Dos horas de intenso cine de verdad, japonés pero válido para cualquier cultura, con una situación del siglo XII pero completamente atemporal, con unos valores envidiables para todo ser humano. Con multitud de preguntas e interrogantes lanzadas a las sociedades de cualquier rincón del planeta.

"(...) Pero el mundo era mucho más cruel de lo que yo imaginaba, de nada sirve la voluntad de una sola persona, al ser humano le son indiferentes las desgracias cuando no le afectan directamente, la piedad se rinde ante el egoísmo. La vida es muy dura, los seres humanos son crueles y en lo más profundo de su ser solo saben pensar en si mismos."

6 comentarios:

  1. Pues no la he visto. De hecho, ni me sonaba... Pero ahora em despierta la curiosidad, querido. Si tengo oportunidad la veré :)

    No creo que la serñora del quinto vea mi blog, pero si llama a mi timbre lo más seguro es que no la abra... Por otra parte, el plato se ve peor en la foto que en la realidad (no es justificación,e n la realidad también da asco), y tengo intenciones de comprarle otro :)

    UN besito, Isra.

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  2. Bueno Isra, asique decis que ya estoy enferma? jajaja, me hizo gracia!!! genial que me lo hayas dicho.. puede ser, quizas...
    Por otro lado, pucha! si que sabes vender una pelicula, con todo lo que dijiste se suma a mi lista larga de las pendientes y espero pronto poder verla!!!..
    La piedad se rinde ante el egoismo.. si, por eso estamos como estamos, siempre corriendo derribando a los demas, sin pedir permiso, mirando solo nuestro ombligo... pero cambiaremos el mundo! si! mmm... beso! Vero.
    p.d: mi palabra verificadora es house asique bueno, me siento como en casa! jeje..

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  3. No la he visto, pero por lo que cuentas vale la pena. Hablaré con mi amigo "Ares" y si me la encuentra la bajo.

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  4. No me sonaba de nada, pero tal y como nos la pintas no pienso perdérmela! Sabes cual tienes que ver? Bienvenidos al Norte, en serio no te la pierdas porque es de las mejroes que he visto en años! Espero que todo vaya muy bien! Un besote Isra! y no te metas con mis gafas (que no son mias pero lo serán)que molan un montón jajaja

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  5. jolin, hay q verla OBLIGATORIAMENTE...la frase del final...cuanta verdad! ay q penita...

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  6. Uau, tu faceta como cinéfilo no la conocía.

    Espero nuevas recomendaciones.

    SAludos

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