viernes, 17 de septiembre de 2010

Desahogo

Y me cuesta hablar de mi día a día.


Este espacio es un desahogo, un lugar donde volcar pensamientos, mil ideas que me dan vueltas y vueltas pero que no expreso abiertamente porque no me sale, por carácter o personalidad me guardo tantas cosas que hacia algún lugar tengo que canalizarlas, y suele ser ésta la tubería por la que salen a chorro y se pierden en un océano infinito de palabras blogosféricas que pululan a millones cada día...


Estoy en Buenos Aires hace dos meses, me quedan tres por delante. El trabajo va in crescendo cada día y no le llamaría agobio a lo que siento, sino una sensación que no conocía que es mezcla de estrés y sintonía conmigo mismo. Algo raro, extraño. No lo entiendo. Van surgiendo problemas en la producción de la película, cada vez nos vamos enredando más y más según avanzamos, y los pasos que pensábamos que eran hacia delante han sido hacía atrás y de repente después hemos encontrado atajos para solucionar cosas, que a la vez plantean más problemas, pero no dejamos de avanzar. Es muy probable que vayamos dejando agujeros negros por nuestro camino, y que éstos se reproduzcan más adelante, pero el objetivo es tan claro que no podemos pararnos porque no tenemos tiempo. 


Supongo que es eso a lo que me refiero con estrés, esos problemas continuos que van surgiendo y que vamos resolviendo o apartando, para seguir andando, pero que están en la cabeza trastocando cosas... A la vez el trabajo que estoy desarrollando me realiza 100%, me encanta el proyecto, trabajar en él desde el principio, contar con la gente que estamos contando para él y conocer gente que se va sumando y aportando granitos de arena del tamaño de montañas. Tenemos la plena convicción que la película va a salir adelante, sea con 6.000 o con 50.000€, pero estamos poniendo todo en el asador para que haya la mayor cantidad de recursos posibles para que la factura técnica sea impecable, ya que la parte artística de los actores está más que copada.


Muchos no tendréis ni idea de qué hablo, pero realmente es la primera vez que explico medianamente lo que estoy haciendo en Buenos Aires, así que no os preocupéis, realmente ni yo entiendo muy bien el cúmulo de sensaciones que tengo en el cuerpo. Sólo necesitaba el desahogo que me permite este rincón, y que tan pocas veces uso para esto... Disculparme.

5 comentarios:

  1. Mi blog también es mi desahogo, lo necesito, aunque ultimamente está abandonaito...

    Supongo que es normal que salgan mil problemas en un proyecto así, y que te acompañe esa sensación de "vértigosatisfacción"...yo te diría que intentaras disfrutar también de ese estrés o lo que sea, que como yo digo, son nervios de los que molan.
    un besoo

    ResponderEliminar
  2. Puedo entender en gran medida de como puedes llegar a sentirte... pero todo pasa...

    desahogate cuanto puedas o cuanto quieras...esta es tu casa... y yo me siento como una invitada alegre y feliz.

    Un beso muy grande Lindo!

    ResponderEliminar
  3. Sigue adelante, valiente.
    Y desahógate lo que haga falta.

    ResponderEliminar
  4. Toda la suerte que pueda llegarte desde este lado del mundo, porque es un proyecto de los que deben dejar de serlo y convertirse en una voz que remueva conciencias.
    ENHORABUENA!!!

    ResponderEliminar
  5. tu desahogo Isra se convierte en desahogo para muchas otras personas. tus tropiezos son siempre pasos hacia adelante y eso es siempre positivo.
    no sé qué ideas podrán rondar tu cabecita pero tan sólo quería transmitirte algo que ya sabes. eres afortunado. lo eres porque estás en una tierra que seguro debe estar llena de personas encantadoras y lugares de ensueño. y encima, querido amigo y compañero de sufrimientos colchoneros, están en ella haciendo algo para lo que quizá has nacido.
    me habría gustado poder ayudar más en ese lindo proyecto pero los relojes de cada uno de nosotros a veces coinciden y otras veces no.
    por ello disfruta de cada tropiezo, disfruta de cada paso en firme, y sigue desahogándote. estoy seguro que en el futuro vivirás experiencias como la que ahora vives más a menudo pero Argentina será para siempre tu primera vez, y esa como ya sabes, nunca se olvida.
    un abrazo fuerte, fuerte.
    y ánimo, mucho ánimo y energía desde Cartagena.

    ResponderEliminar

Opina, critica, aporta.