miércoles, 16 de diciembre de 2009

¿Dónde queda la libertad?

Impedir un alzamiento de voces críticas.
Proteger a quien no merece tal consideración.
Llenar de violentos guardianes las calles.
Encarcelar a quien reclama cambiar el modelo.
Detener masiva y PREVENTIVAMENTE.
Tiene cojones.

¿Podemos seguir así?

Copenhague se ha convertido en una gran cárcel. Cualquier manifestación es reprimida con gases lacrimógenos, millares de miembros de las fuerzas de (in)seguridad han tomado las calles, se detiene a diestro y siniestro a gente cuyo delito es manifestarse contra los poderosos, los que mandan y los que rigen nuestras vidas con mano firme.

Detención preventiva es una expresión acuñada en estos días, cuyo significado, sinceramente, me da verdadero pánico. No quiero valorarlo porque me asusta realmente a que extremos estamos llegando.

Y no entro tampoco a valorar lo que se debate en esa "cumbre", ni el motivo por el cual se quejan los manifestantes; abrí este rincón prometiendo que no dejaría entrar aquí ni un sólo debate político, y no va a ser menos. Tan solo quiero expresar este miedo, esta sensación de nerviosismo ante estos tiempos difíciles, ante estos tiempos en el que las libertades van en claro retroceso.

6 comentarios:

  1. Rotundo retroceso, diría yo. Y aún hay algunos que lo niegan, encubriendo lo evidente con tintes de transición. En fin.

    ResponderEliminar
  2. "Necesito alguien que me proteja de los mecanismos que han puesto para protegerme"

    ResponderEliminar
  3. Y todo para que los calentólogos puedan seguir de putas, que ahora les sale gratis. ¡Navidad, Navidad, dulce Navidad...!

    ResponderEliminar
  4. Habrá que mover las alturas desde el sótano... pero, ¿a ver cómo se hace eso?

    ResponderEliminar

Opina, critica, aporta.